Buena noticia de fin de año para el fútbol capitalino

Santa Fe y Millonarios hicieron la tarea: ganaron el domingo y se clasificaron a los cuartos de final de la Liga Águila, cuyo sorteo será este lunes. Cardenales y embajadores aseguraron además su participación en algún torneo internacional en 2017.

Aparentemente los albirrojos tenían la tarea más complicada, pues debían ganarle al Once Caldas en Manizales para no depender de otros resultados. Sin embargo, apenas a los dos minutos de juego, el defensa Héctor Urrego marcó un gol que le aclaró el panorama al equipo de Gustavo Costas, que en el primer tiempo tuvo al menos cinco oportunidades más para anotar.

Los locales reaccionaron en el complemento y lograron la paridad, por intermedio de Jonathan Lopera, pero poco después Humberto Osorio Botello volvió a darles la ventaja a los albirrojos, que terminaron sufriendo porque el empate los hubiera eliminado del torneo.

“Jugamos el partido como la final que era. No debimos terminar apretados, pero fallamos mucho en la definición y eso nos costó. Sin embargo, prefiero quedarme con todo lo bueno que hizo el equipo. No era fácil llegar con la obligación de ganar para no depender de otros resultados, pero los jugadores mostraron jerarquía y hasta logramos quedar entre los cuatro primeros. Para la siguiente fase no tengo una preferencia en el rival, pero les aseguro que, como hoy, vamos a dejar todo dentro de la cancha”, aseguró en la rueda de prensa el técnico Costas, satisfecho porque “seguimos en carrera por el título, que por lo visto en este torneo tan parejo, no es imposible para ninguno”.

Mucho más dramática fue la clasificación de Millonarios, que puso a gozar a cerca de 33 mil hinchas que lo acompañaron en El Campín.

Y eso que a los cinco minutos ya le iba ganando al Independiente Medellín, con un gol de Óscar Barreto.

Pero el sufrimiento llegó al cuarto de hora de juego, cuando el juvenil Mauricio Cortés igualó el marcador. En ese momento, Envigado ya le iba ganando a Cortuluá y dejaba afuera a los azules.

Cali y Tolima, mientras tanto, les ganaban a Águilas y Jaguares, respectivamente, con lo que aseguraban su cupo entre los ocho.

Como los otros resultados no le servían, Millonarios necesitaba un gol para volver a meterse entre los clasificados. Salió más decidido en el complemento y generó peligro en predios de David González, aunque también se expuso al contragolpe del poderoso.

Hasta que a los 70 minutos llegó el gol de la tranquilidad. Andrés MangaEscobar mandó al fondo de la red el balón que le bajó de cabeza Gabriel Díaz y decretó el 2-1.

Entonces comenzó la fiesta azul en El Campín. Los murmullos y reproches desde la tribuna se convirtieron en cantos y gritos de aliento. El técnico Diego Cocca mandó a la cancha a David Macallister Silva y Rafael Robayo para cerrar el partido y los volantes le respondieron, pues manejaron el balón y evitaron que Medellín se acercara al área de Nicolás Vikonis.

A 10 minutos del final, Ayron del Valle decretó el 3-1 final, tras una brillante jugada de Maxi Núñez. El delantero embajador llegó así a 11 anotaciones en el torneo e igualó en el liderato de la tabla de goleadores al veterano Diego Álvarez, quien casi simultáneamente marcaba de penalti el gol del triunfo de Patriotas en el clásico ante Chicó, que le dio la clasificación a su equipo.

Al final, a Envigado no le alcanzó para clasificar y se quedó fuera a pesar de haber sumado 32 puntos, una cifra que se pensaba sería suficiente para avanzar.

El que a la postre salió de los ocho fue Alianza Petrolera, que cayó 1-0 en su visita a Fortaleza, en Techo.

Este lunes se realizará el sorteo de los cuartos de final, en los que Nacional, Cali, Tolima y Santa Fe serán cabezas de serie y tendrán la ventaja de cerrar en casa sus respectivas llaves. Millonarios jugará el próximo fin de semana en El Campín, ante alguno de ellos.

“Nosotros queríamos darle la clasificación a esta gran hinchada. Fue un partido muy difícil, en el que por momentos no supimos cómo atacar, pero por fortuna ellos no vinieron a meterse atrás, sino a proponer también y eso nos dio espacios. En estos últimos juegos mostramos jerarquía, ganamos cuando tocaba y ahora vamos por más. Nadie nos puede impedir soñar con salir campeones”, dijo en la zona mixta Andrés Escobar, quien salió ovacionado por una afición a la que hoy poco le importa la irregularidad de su equipo y que, más con el corazón que con argumentos futbolísticos, sueña con cosas grandes.

Lo que sí es ya una realidad es que rojos y azules jugarán un torneo internacional en 2017. Por ahora tienen los dos cupos que da la reclasificación a Copa Libertadores, aunque el Cali todavía está en la disputa. Como mínimo, irán a la Sudamericana.