Excelentes consejos para mejorar nuestra memoria

uan Pablo Duque y David Cantor, los primeros colombianos clasificados en concursos mundiales de memoria y cálculo mental, y que representarán al país en el próximo evento global que sobre la materia se celebrará en Las Vegas (Nevada, Estados Unidos), del 7 al 11 de noviembre.

Estos dos cerebros comparten las siguientes claves.

Recordar nombres

El nombre es la carta de presentación de cada persona y todos quieren ser recordados por los demás. Cuando una persona es llamada por su nombre de pila, sucede un fenómeno curioso: se agudizan los sentidos, las pupilas se dilatan y la atención hacia esa persona aumenta; se siente valorada e importante.

Si quiere memorizar el nombre de quien recién conoce, escuche con atención cuando se la presenten; si no lo entiende o no lo captó bien, pida que se lo repita mirándola a los ojos. Y cuando ya lo tenga claro, repítalo en voz alta, incluso el apellido: “Mucho gusto, Leonardo Muñoz. Encantada de conocerlo”.

Si tiene dificultades para memorizarlo, eche mano de tres herramientas: construcción, asociación y recuperación.

Construcción: busque una palabra que fonéticamente se parezca al nombre o apellido. Por ejemplo: asocie Leonardo con león y con dardo, y Muñoz con moños.

Asociación: cree una imagen con estos elementos; imagine que Leonardo está peinando la melena de un león con un dardo; está tan larga y tupida que se le pueden hacer varios moños y trenzas.

Recuperación: en adelante notará que cada vez que vea a Leonardo su cerebro evocará la imagen del león melenudo, con trenzas y moños. Automáticamente aparecerá el nombre.

Según los expertos, lo más difícil (aunque no imposible) es encontrar palabras que se asocien con los nombres y apellidos, así que se vale ser creativos: Osorio con oso, Martínez con Martini, Gómez con goma, García con garza y Cantor con cantante, entre otros.

Vocabulario extranjero

Recordar palabras o términos en otro idioma es mucho más complejo, dado que a la persona le cuesta trabajo asociar su fonética con el significado. Echando mano de las mismas herramientas que se usan para el español, es posible recordar con facilidad. La clave está, para empezar, en asociar el término con su significado en español. Por ejemplo el apellido Bush con la palabra arbusto.

Construcción: busque una palabra concreta en español que al pronunciarla tenga un parecido fonético con la pronunciación de la palabra a memorizar en inglés. Así, Bush puede asociarse con bus.

Asociación: cree una relación entre las dos palabras, utilizando una visualización creativa basada en las emociones. En este caso arbusto -> George W. Bush.

Debe estar imaginando al expresidente Bush escondiéndose detrás de un arbusto o un arbusto que sale por las ventanas de un bus.

Recuperación: cuando quiera saber cómo se dice arbusto en inglés, evocará la asociación hecha por usted, durante la que imaginó al expresidente escondido y sabrá que la palabra clave en este caso es Bush.

Otros ejemplos prácticos de asociación son run (correr) con un grupo de ranas corriendo y para heart (corazón) puede imaginar que su corazón es una jarra que bombea sangre a todo su cuerpo.

Memorización de números

El cerebro difícilmente capta un concepto abstracto y los números son un gran ejemplo de ello, por esta razón se dificulta tanto memorizar información que contenga datos numéricos, como tablas de multiplicar, teléfonos, direcciones, fechas de cumpleaños, la clave de la tarjeta, fórmulas matemáticas, datos históricos, y artículos y leyes.

Para poder memorizar números debe primero convertir en algo más concreto cada cifra, para que el cerebro fácilmente pueda captarlos. Recurriendo a los tres pasos de la memoria (construcción, asociación y recuperación) se puede recordar más fácilmente. Digamos que necesita memorizar la clave de su tarjeta débito, que es 3490.

Construcción: primero convierta cada número en una consonante, utilizando la siguiente tabla:

Tabla

Las letras que corresponden para 3490 son M R P S; después, sumando vocales a las consonantes que componen el número convertido, se construye una palabra concreta: M R P S se convertiría en: MaRiPoSa

Asociación: hecho lo anterior, cree una asociación visual, fantástica e inverosímil, utilizando la nueva palabra y lo que significa el número a memorizar. En este caso podría, por ejemplo, imaginar que cuando saca la tarjeta débito y va a escribir el número, una mariposa grande y llena de colores se posa sobre el cajero automático, y es ella la que escribe la clave.

Recuperación: cuando quiera saber la clave de la tarjeta evocará la asociación hecha de la mariposa sobre el teclado del cajero, y automáticamente recordará el número.

Ahora, si se trata de recordar el número de teléfono de una persona, recurra al proceso anterior y construya varias palabras, con las cuales pueda elaborar una historia cuyo protagonista sea el dueño de la línea.

Por ejemplo: Juan Pablo 3005648696

Construcción: 30 05 64 86 96 -> MeSa SoL GoRRa FueGo PeGa

Asociación: Juan Pablo se sube a una mesa para tratar de alcanzar el sol; como la luz es tan fuerte, él se pone una gorra que es suficiente para ocultarse y se prende en fuego… Para apagarlo se pega y se pega contra el suelo.

Recuperación: cuando quiera recordar el número de Juan Pablo, evoque la historia; notará que aparecen las palabras claves mesa, sol, gorra, fuego y pega; si está familiarizado con la tabla, las consonantes se transformarán automáticamente en el número de teléfono de Juan Pablo.

CARLOS F. FERNÁNDEZ
Médico de EL TIEMPO

eltiempo.com