Hallan en río Besòs de Barcelona una bacteria que puede descontaminar acuíferos

Los investigadores obtuvieron de los sedimentos del río Besòs un cultivo bacteriano estable, que transforma partículas dañinas en productos inocuos para el medio ambiente de la zona.

Una bacteria que se encuentra en la desembocadura del río Besòs (Barcelona) es capaz de descontaminar acuíferos, según han identificado y comprobado investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).

Así lo ha explicado el centro universitario en un comunicado difundido este jueves después de descubrir, caracterizar y cultivar esta bacteria, del género Dehalogenimonas, por primera vez en Europa, lo que “abre las puertas” a su reproducción y aplicación en acuíferos contaminados.

Se trata de una bacteria que sólo puede utilizar compuestos organoclorados como fuente de energía durante su proceso de respiración, transformándolos en productos menos clorados, más biodegradables y, en algunos casos, inocuos, es decir, que dejan de dañar su entorno.

Tras tres años de investigación, los expertos han obtenido de los sedimentos del río Besòs un cultivo bacteriano estable y demostrado su capacidad de transformar las partículas dañinas (hidrocarburos alifáticos clorados) en productos inocuos para el medio ambiente de la zona.

Eliminar contaminantes

La obtención del consorcio bacteriano abre las puertas a su producción y posterior aplicación en acuíferos contaminados mediante la estrategia de bioaumentación, que consiste en la adición de las bacterias capacitadas para eliminar estos contaminantes.

“Poder cultivar estas bacterias en Europa permite abaratar significativamente los costes para su aplicación, ya que las empresas que las comercializan se encuentran mayoritariamente en América del Norte”, explica Ernesto Marco, coordinador de la investigación.

Marco asegura que esta práctica podría favorecer su aplicación directa en las propias plantas industriales debido a que la contaminación de acuíferos es uno de los problemas ambientales más graves de la industria del país y de Europa.

Según los datos de la Agencia de Residuos de Cataluña, un 8% de los suelos contaminados censados en 2014 contienen compuestos organoclorados, 77 de los cuales superaban las concentraciones máximas de referencia.

Este género bacteriano se describió en 2009 y hasta ahora sólo se han conseguido aislar dos cepas en acuíferos contaminados con cloroalcanos en Luisiana (Estados Unidos), y se han identificado secuencias se su genoma en diferentes localizaciones del mundo.

EFE – elespectador.com