Tenga cuidado con estás señales, pueden indicar que su hijo no es feliz
Tenga cuidado con estás señales, pueden indicar que su hijo no es feliz
Conocer cómo vive las emociones tus hijos es fundamental para cuidar su salud mental. Te contamos cómo identificar si un niño es feliz o no.
Si bien los niños deben vivir todas las emociones, aprender de ellas y procurar autorregularlas para llegar a la calma y el control, es responsabilidad de los adultos garantizar su sano desarrollo, principalmente los primeros años de vida.
El riesgo está en que la infelicidad en los menores, derivada de la no satisfacción de sus necesidades básicas y emocionales, puede generar estrés tóxico y poca empatía e inducirlos a padecer trastornos.
Cómo saber si un niño es feliz o no
Según el Ministerio de Salud y Protección Social, el 88 % de los niños en Colombia tienen alguna afectación de su salud mental. Cuando un niño logra regular sus emociones se refleja en su habilidad para interactuar con otros, es más empático, compasivo, resiliente y resuelve situaciones complejas de forma controlada y tranquila; disfruta más de las experiencias que se le presentan cada día, evitando estados de ansiedad y estrés.
En caso contrario, los niños se ven inseguros y temerosos, muestran poco rendimiento escolar y pueden presentar adicciones. Un niño que no se siente feliz o en calma, es un ser humano que posiblemente tendrá afectaciones en su salud física, mental y en su productividad adulta.
De acuerdo con los expertos de United Way Colombia, “la felicidad es una experiencia relacionada con el desarrollo biológico del cerebro que generan unas hormonas que contribuyen a sentirse bien”.
Son muchos los factores que pueden generar falta de autorregulación emocional en la población infantil: la no satisfacción de sus necesidades básicas y emocionales, el sentirse mal cuidado, falto de protección, carente de afecto y compañía, estrés, bullying, violencia intrafamiliar, vulnerabilidad ante situaciones externas o peligro de muerte.
¿Cuáles comportamientos generan alarma?
- Un niño o niña que se muerde los labios y dedos
- Si prefiere estar solo antes que interactuar con otros
- Llora constantemente
- Se queda cerca de sus maestros o se limita a unos pocos amigos
- Es temeroso
- Tiene episodios irascibles sin justa causa está dando señales de ansiedad
¿Qué podemos hacer para ayudarlos?
Un padre de familia o profesor debe fortalecer sus habilidades socioemocionales para encontrar la sensibilidad con el niño o niña, entendiendo que es un ser humano en evolución.
Es necesario generar empatía con su desarrollo, pues no solo es enseñar a través de órdenes, es acompañar su proceso para conocer el mundo con paciencia y respeto para lograr un entorno seguro donde se garanticen sus derechos.
“Si no logra conectar con el niño o la niña, siempre se debe buscar un mediador profesional que ayude a trabajar esa comunicación y diferentes herramientas que generen ese vínculo”, concluyó Cristina Gutiérrez de Piñeres, directora de United Way Colombia.
Colaboratorio Socioemocional
En respuesta a la preocupante situación, United Way Colombia creó el Colaboratorio Socioemocional, una experiencia lúdica basada en la neurociencia que promueve el desarrollo socioemocional y cognitivo de los niños entre 3 y 8 años, que viene promoviendo a través de la campaña “A ser feliz ¡también se aprende!”.
A través del Colaboratorio Socioemocional, se enseña a los adultos a guiar a los niños para que vivan experiencias que le aportan en la autorregulación de sus emociones. “Más que buscar un niño feliz, lo importante es orientarlo para que se encuentre en calma y aprenda a regular sus emociones”, advirtió Cristina Gutiérrez de Piñeres, directora de United Way Colombia.
Tomado de: Pulzo.com