Se complica la realización de la revocatoria del Alcalde de Bogotá
Seis meses tendrá el Consejo Nacional Electoral (CNE) para decidir sobre la investigación contra Gustavo Merchán, miembro del comité promotor Unidos Revocamos a Peñalosa, por la presunta violación de los topes de financiación e irregularidades en la presentación de los estados contables.
La formulación de cargos y la práctica de pruebas fue ordenada en la sala plena realizada este martes por el CNE, luego del informe presentado por el Fondo Nacional de Financiación Política, el cual llevó a cabo la revisión y certificación de la contabilidad, en la cual se encontraron las presuntas violaciones de las normas.
Todo apuntaría a que la revocatoria se caería porque los tiempos para convocarla no se alcanzarían a cumplir.
La actuación administrativa adelantada desde el año pasado por el comité promotor –el cual vio la luz en el Sindicato de Telecomunicaciones de Bogotá (Sintrateléfonos)– buscaba sacar del cargo al actual mandatario de Bogotá.
Según los cálculos, el tope total era de 410 millones de pesos y el individual, del 10 por ciento, es decir, 41 millones de pesos, pero al parecer varias personas o entidades se volaron ese límite y entregaron cifras que llegaron a los 50 millones de pesos, entre otras presuntas irregularidades.
Para que la revocatoria fuera aprobada se requería el certificado de validez de las firmas presentadas ante la Registraduría Nacional. De las 706.708 presentadas en mayo del 2017, cerca de 458.000 fueron válidas, por lo que se otorgó el certificado de este primer paso.
Luego se debía avalar que la campaña de revocatoria cumpliera el tope establecido para su financiación, para lo cual se debían revisar las cuentas del comité.
Al respecto, el magistrado del CNE Felipe García había dicho: “No podemos certificar las cuentas hasta que no concluya la investigación”.
El expresidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos Humberto Sierra Porto, asesor del alcalde de Bogotá para el asunto de la revocatoria, celebró que esta decisión se haya tomado antes de las elecciones, para que no se siga utilizando políticamente.
También dijo que es el momento de “una reflexión a fondo sobre cómo se debe llevar a cabo un proceso de revocatoria” tanto para la estabilidad de los gobernantes como para los ciudadanos que la impulsan.
Entre tanto, el representante a la Cámara Inti Asprilla, del partido Alianza Verde, se mostró indignado con la decisión. A su juicio, “se ha roto el orden constitucional, por lo que advirtió que le han quitado la posibilidad a los bogotanos de manifestarse en las urnas”, aseveró.
Por su parte, Andrés Villamizar, director de la fundación Azul Bogotá, la cual defiende la gestión del mandatario, señaló que “esta es una gran noticia para la ciudad porque ahora Peñalosa podrá concentrarse en seguir sacando adelante sus grandes proyectos”.
eltiempo.com