Pasaje de TransMilenio costará $2.000 a partir del 3 de febrero
El alza, de 200 pesos, fue anunciada por la Secretaría de Movilidad.
Este miércoles la Secretaría de Movilidad anunció que a partir del 3 de febrero se modifican las tarifas del Sistema Integrado de Transporte Público (SITP). El pasaje de los servicios zonales quedará en $1.700 y el de TransMilenio en 2.000 pesos. El costo de los transbordos se mantendrá en 300 pesos durante todo el día.
La medida conserva los subsidios vigentes a la población SISBEN, a personas en condición de discapacidad y a adultos mayores, de manera que se dé acceso al sistema a las poblaciones vulnerables.
De acuerdo con las recomendaciones que hizo Transmilenio a finales del año 2015 se requiere un aumento tarifario de 200 pesos para garantizar la sostenibilidad y viabilidad del sistema, con los niveles actuales de oferta, dentro del marco fiscal definido por la Secretaría de Hacienda.
Actualmente hay un déficit del Fondo de Estabilización Tarifaria (FET) de 751.369 millones de pesos al año. Entre 2012 y 2015 la Secretaría de Hacienda se vio obligada a aportar 1,9 billones de pesos para el sostenimiento financiero del SITP, restándole presupuesto a proyectos de sectores como salud y educación.
Si se hubiera aumentado la tarifa gradualmente entre 2012 y 2015 con el índice de aumento del salario mínimo, la tarifa debería ubicarse en cerca de $2.100 pesos para el sistema troncal y $1.800 pesos para el zonal. Se optó por aumentar la tarifa en $200 pesos, considerando la capacidad de pago de los usuarios.
El ente gestor del SITP recomendó eliminar la franja valle dado que la medida ya cumplió su objetivo y se agotó su efecto, cuya intención inicial era atraer más usuarios en esas horas. El déficit se ve agravado por el fenómeno de evasión –más conocido como ‘los colados’- que se calcula entre 10% y 15% del recaudo que el sistema debería captar por el servicio ofrecido a los bogotanos.
Por el pasaje de cada habitante la ciudad pagaba más de $430 y ahora este déficit se reduce a la mitad. Con el incremento en la tarifa se espera reducir el déficit del sistema en cerca del 50%. El no subir la tarifa implicaría que los recursos que el Distrito debe destinar al Fondo de Estabilización Tarifaria (FET) sean cada vez mayores. Una mayor destinación de recursos a la operación de TransMilenio implica una reducción en los recursos que se podrían destinar a otros programas y proyectos que van a suplir muchas otras necesidades que tiene la ciudad.
“La Administración Distrital está comprometida con el mejoramiento del sistema de transporte público. El ajuste de la tarifa es un primer paso en un proceso que busca que los buses del SITP lleguen a los barrios que hoy no llegan, el transporte en el sistema sea cada día más seguro y podamos garantizar que tendremos un mejor sistema de transporte público en los próximos años”, indicó el Distrito.
Vale la pena recordar que el exalcalde de Bogotá, Gustavo Petro, se enfrentaría a una nueva investigación por parte de la Procuraduría General de la Nación debido a que durante los cuatro años de su gobierno nunca acató recomendaciones jurídicas y técnicas para aumentar la tarifa de TransMilenio.
Funcionarios de la Administración Distrital, con toda clase de documentos jurídicos, técnicos y financieros, le recomendaron a Petro decretar el alza, como es una obligación, pero el entonces alcalde ignoró esas directrices durante cuatro años. Hasta en la última semana sus funcionarios le sugirieron tomar la medida, pero Petro no hizo caso.
Por ignorar y guardarse esos conceptos y teniendo en cuenta el hueco fiscal de TransMilenio, Petro se expone a una nueva investigación por parte del Ministerio Público, pues en varias oportunidades anunció que la tarifa de transporte público de la ciudad se mantendría tal y como estaba, a pesar de que el gerente del sistema, Sergio París, sugería el incremento basado en un estudio hecho por la Subgerencia económica, que hablaba de la necesidad de incrementar la tarifa.
TransMilenio, en su momento, reconoció problemas financieros y manifestó que este desequilibrio podría implicar una modificación a la tarifa cobrada a los usuarios.
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