Al día se roban 30 medidores de agua en Bogotá
DE 2012 A 2015 FUERON HURTADOS 36 MIL APARATOS. LAS ZONAS MÁS GOLPEADAS: OCCIDENTE, CENTRO Y NORTE.
Cada vez que hurtan un medidor de agua, los vecinos se enteran por el reguero en la calle. Alguien avisa. Y el afectado pregunta: ¿y a qué hora lo hicieron?
Nadie escuchó nada, nadie vio nada. Ni el propio vigilante de la cuadra da razón alguna.
Los delincuentes no dan tregua y aunque en los últimos años la tendencia ha sido a la baja, entre 2012 y 2015 se llevaron cerca de 36 mil aparatos.
Solo en lo corrido de 2015 –a corte de junio 30–, la cifra oficial asciende a 5.379, es decir que el promedio diario es cercano a los 30 registros hurtados.
El pico más alto fue en el 2010: se robaron 20.192.
Según el reporte actual entregado por la Empresa de Acueducto y Alcantarillado (EAAB), en los últimos seis meses las zonas más afectadas por la delincuencia son el occidente y el centro de la ciudad.
Este año, los barrios más golpeados por los delincuentes y donde los ciudadanos han solicitado cambio por hurto son los georreferenciados de la zona 3, que corresponde al centro de la ciudad, entre ellos Marsella, Tejar, Alquería, Alcalá, La Candelaria, entre otros.
De igual manera, la zona 5, de Bosa, Kennedy y Soacha, y en concreto los barrios Tierra Buena, Kennedy Central y el Paraíso, ha sido atacada por estos delincuentes que se mueven por diferentes sectores de la ciudad.
Los ladrones utilizan las horas de la noche y la madrugada para arrancar estos elementos. Lo más grave es que los medidores los tiene que pagar de su bolsillo el cliente suscriptor.
Cada medidor tiene un costo que se le factura al usuario. “Según la Resolución sobre ‘costos de conexión’ N.° 0188 del 1 de abril de 2015, el valor cobrado a los usuarios residenciales por el suministro de medidor de 1/2 pulgada es de 127.770 pesos, valor que incluye IVA, verificación metrológica e instalación”, afirma la Empresa.
La obligación de los usuarios es instalar, mantener y reparar estos instrumentos que permiten establecer el consumo de agua potable que suministra la EAAB.
“De acuerdo con el artículo 144, del capítulo IV de la Ley 142 de Servicios Públicos, la EAAB le cobra al usuario el valor del medidor y la empresa asume los costos de la instalación”, señala la empresa.
Todo parece indicar que los sujetos primero analizan la zona: ubican las cámaras de seguridad y determinan hacia qué lado están enfocadas, y luego, en horas de la noche o cuando llueve, estacionan un vehículo y en cuestión de segundos arrancan el aparato.
¿Qué medidores roban?
La EAAB advierte que la mayor cantidad de solicitudes se da cuando en los predios hay medidores antiguos, es decir aquellos que tienen carcasa o esqueleto de metal del tamaño de media pulgada. Lo más preocupante es que el 95 por ciento de la ciudad tiene este tipo de medidores.
Cuando un medidor es hurtado, el propietario o las personas que habitan el predio deben comunicarse de inmediato con la Acualínea 116 y reportar al 123 la situación.
Es importante señalar que la EAAB recomienda hacer este procedimiento lo más pronto posible para que la orden de reposición del aparato sea realizada en las próximas 24 horas siguientes a la solicitud.
Hay otro tipo de medidores que también está siendo hurtado. Se trata de los totalizadores: más de 60 este año. Son instrumentos de medida que se instalan antes de la entrada de los edificios de apartamentos y conjuntos residenciales.
Las zonas más golpeadas por este último flagelo son Usaquén, Suba y Chapinero, especialmente los barrios La Calleja, Molinos del Norte, San Patricio, Santa Bárbara Occidental, Chicó, Santa Bibiana, Pasadena, Puente Largo, Batán, entre otros.
Las autoridades recomiendan a los vigilantes hacer rondas, estar conectados con los otros edificios y redireccionar las cámaras.
Diarioadn.co