Crean trampa que podría reducir casos de dengue
De color rojo, atractivas para los insectos y con un costo comercial muy bajo. Así son las primeras trampas creadas, con apoyo de docentes, por estudiantes egresados de la Universidad Industrial de Santander (UIS) para cazar y monitorear al Aedes aegypti, el mosquito transmisor del dengue, la chikunguña y la fiebre amarilla.
Jessica Peña, Laura Bueno, Mónica Navarro y Luz Marina Arboleda, con las observaciones del docente Jonny Duque, del Centro de Investigaciones de Enfermedades Tropicales, y Héctor Parra, del grupo Interfax, trabajaron durante cinco años en la etapa de investigación y creación de los novedosos aparatos.
Se trata de una estructura en forma piramidal que posee tres niveles: uno superior, que permite la entrada del mosquito y dificulta su salida; un nivel medio donde se aloja el zancudo hembra, y que facilita su estudio, y un último compartimento donde se dispone el agua o cebo que atrae a esta especie.
Hay una segunda trampa, que es un aparato de cartón cuadrado que permite la captura y posterior eliminación del mosquito con un adhesivo, todo gracias un cebo.
“Esta trampa es muy discreta y se quiere comercializarla para uso casero. La idea es que sean económicas para los usuarios, porque las actuales funcionan con sistemas electrónicos que pueden llegar a costar hasta 700.000 pesos”, señala el diseñador industrial Héctor Parra, quien ve viable la venta masiva del aparato con un costo de apenas 2.000 pesos.
Aunque en el mercado internacional existen trampas similares para atrapar mosquitos, los dos artefactos serían un aporte en el tema del control de plagas debido a su aspecto, pues los hace atractivos a mosquitos portadores de enfermedades.
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