¿Por qué se producen los temblores?
Donde están las placas tectónicas ocurren sismos, se forman volcanes y fosas de gran profundidad.
“Es algo muy extraño. Me refiero a los terremotos. Estamos firmemente convencidos de que, bajo nuestros pies, la Tierra es algo firme, sólido, inamovible. Incluso decimos ‘tener los pies sobre la tierra’. Sin embargo, un día de repente nos damos cuenta de que no es así. La tierra y las rocas, que se suponían sólidas, se agitan en todas direcciones como un líquido. Eso es lo que he oído en las noticias de la televisión”.
Estas son las palabras del escritor japonés Haruki Murakami en su libro ‘Después del temblor‘, evocando el sismo de 1995 que destruyó parcialmente a Kobe, la ciudad en donde creció, y dejó más de seis mil víctimas mortales y trescientos mil desplazados en su país.
El suelo, que suponemos firme bajo nuestros pies, es la corteza más externa de nuestro planeta, llamada litosfera, y está roto en grandes trozos, o placas tectónicas, que flotan sobre un mar de roca líquida de más de doscientos kilómetros de profundidad, la llamada astenosfera. En la Tierra hay ocho grandes placas y otras más pequeñas. En los lugares donde estas se encuentran ocurren sismos, se forman volcanes y cordilleras o se producen trincheras oceánicas de kilómetros de profundidad.
El sismo en Nepal se produjo luego del encuentro entre la placa en la que se halla la India y la gran placa en la que se encuentran Europa y la mayoría de Asia. El choque entre estas hace que la placa de la India se deslice debajo de la otra a una velocidad de cuatro centímetros cada año.
La colisión levanta la superficie de la Tierra y forma la cordillera del Himalaya, la más alta de nuestro planeta. El 25 de abril, la colisión produjo una ruptura en el límite entre las dos placas de unos 150 kilómetros de largo, 50 de ancho y 20 de profundidad en apenas una centena de segundos, y causó, hasta la fecha, más de siete mil muertes y cientos de desplazados.
El terremoto no fue una sorpresa. Nepal, al igual que grandes porciones de Colombia, está en la zona en la que se encuentran dos placas tectónicas.
Muchas de las construcciones en el valle de Katmandú se realizaron en la cuenca de un lago desecado, y las condiciones del suelo, constituido primordialmente de sedimentos, han magnificado las consecuencias del sismo.
El 12 abril de este año, Geohazards International, una organización especializada en la evaluación de riesgos sísmicos, había descrito en un reporte que el aumento y la densidad de población en el valle de Katmandú hacen vulnerable a esta región ante los efectos de un temblor. Posiblemente, los mismos argumentos se aplican para muchas regiones de nuestro país.
Nadie sabe con certeza cuándo se producirá el próximo terremoto, pero sí sabemos cómo minimizar sus efectos. Prefiero pensar que no tendremos que esperar a que la naturaleza evalúe la ética de quienes construyen nuestras ciudades o la gestión de los organismos que los controlan.
En mayo del 2008, en la provincia de Sichuan (China), un terremoto produjo la muerte de veinte mil niños que se encontraban en las escuelas que colapsaron con el sismo. La negligencia de los constructores y de agentes del Gobierno en este asunto ha sido denunciada por muchos personajes, entre ellos el artista Ai Weiwei, quien se encuentra bajo arresto domiciliario. Los nombres de los niños que murieron en la tragedia están escritos en uno de los muros de su despacho.
JUAN DIEGO SOLER
Especial para EL TIEMPO
Twitter: @juandiegosoler