Con estos mensajes de texto y llamadas falsas están estafando en Bogotá
Según las autoridades, en 2021 las estafas en la capital tuvieron un incremento del 31 por ciento.
Esa tarde llamaron a mi papá diciéndole que yo me había accidentado. Le dijeron mi nombre completo y que me iban a llevar a un hospital para que me atendieran, pero que necesitaban la autorización de un familiar, y que transfiriera medio millón para cubrir los gastos médicos”, cuenta Juan Esteban Leal, bogotano de 25 años y quien vivió momentos de angustia junto con su familia por culpa de inescrupulosos.
Leal relata que después su madre lo llamó para preguntarle dónde se encontraba. “Ella solo me decía que si estaba bien, y yo no entendía qué era lo que estaba pasando. Le expliqué que estaba en la oficina trabajando y que no me había accidentado”, agregó.
Él asegura que no satisfechos con haberles causado tal preocupación, los estafadores continuaron llamando a su padre, pero ya sabiendo que Juan Esteban estaba bien, hizo caso omiso. “Como se dieron cuenta de que no se les respondía, entonces marcaban desde otros números”. Ante esta situación, Juan Esteban y su familia decidieron denunciar el caso con las autoridades.
Según el Centro Cibernético de la Policía Judicial (Dijín), la denuncia de Leal no fue la única en esta temporada. Durante el 2020 y 2021, dijo la Dijín, se registró un incremento en las denuncias por estafa; los grupos delincuenciales saben que los ciudadanos están realizando más compras a través de internet y pueden sustraer datos personales provenientes de las plataformas donde se realizan pagos.
De hecho, la entidad señala que “respecto a la ciudad de Bogotá, para el año 2020 se recibieron 14.243 denuncias por estafa, que al ser comparado con el 2021, se evidencia un incremento del 31 por ciento, para un total de 18.649 denuncias”.
Además, del total de casos reportados a nivel nacional el año pasado (71.727 denuncias), la capital representa el 25 por ciento del total de denuncias.
Johan Avendaño, experto en seguridad ciudadana, explica que el aumento en los llamados ciberdelitos tiene que ver con la exposición de datos personales en redes sociales y el registro de actividades bancarias que permiten que los delincuentes obtengan información detallada de las víctimas.
“Tiene que ver con el contexto de la pandemia, en el sentido de que al estar confinados y el uso masivo de plataformas digitales generó que salieran productos falsos, ventas ilegales y estafas”, puntualiza Avendaño, quien explica que el analfabetismo cibernético contribuye a caer en los anuncios llamativos y ofertas que en el fondo buscan apropiarse de la información personal.
Precisamente, ese fue el caso de Milena Guzmán, contadora de profesión y quien fue estafada por medio de un mensaje de texto en el que le indicaban beneficios tributarios en el pago de los impuestos.
“Me llegó un mensaje al celular que decía que tenía la factura del impuesto atrasada, y que si quería acceder a un descuento, debía pagar a través del SuperCade virtual y ponía un link”, dice Milena.
Ella afirma que en medio de su inocencia le dio clic al enlace y la redirigió a una página en la que ingresó sus datos personales para realizar el pago de la factura vencida.
“Yo llené todas las casillas. Todo parecía normal, una página común y corriente, pero lastimosamente ingresé la información bancaria y me robaron”.
Las autoridades y expertos recomiendan que para evitar ser víctimas de hurtos informáticos es importante que las personas revisen de dónde provienen las comunicaciones y se cercioren de que los sitios web en los que se ingresan sus datos sean oficiales.
“Hay que ser muy precavidos y cautelosos cuando nos llegan este tipo de llamadas. Es bien sabido que no se deben dar datos personales a ninguna entidad. Además, hay que tener precaución con la publicación en redes sociales de información sensible”, concluye Avendaño.
Por su parte, las autoridades advierten a los ciudadanos que los delincuentes no requieren de una gran infraestructura para estafarlos; para ello solo necesitan tener acceso a una línea celular y los datos básicos de la posible víctima, por lo que ante una situación sospechosa no debe dudar en reportarlo a través de los canales oficiales y la línea de emergencia 123.