Ola de calor deja más de 400 muertos en Pakistán.

Una ola de calor provocó la muerte de más de 400 personas en los últimos tres días en la ciudad de Karachi, en el sur de Pakistán, dijeron el martes funcionarios de salud, mientras se montaban campamentos para atender emergencias en las calles.

La ola de calor coincide con una serie de cortes de luz, lo que desató duras críticas al gobierno provincial y a K-electric, la compañía que provee electricidad a Karachi, la ciudad más rica del país donde viven 20 millones de personas.

Autoridades de uno de los mayores hospitales públicos de Karachi informó que todas las camas estaban completas y que más de 200 personas murieron allí por deshidratación o por un golpe de calor.

“Algunos fueron ingresados muertos, mientras otros murieron durante el tratamiento”, dijo el doctor Seemin Jamali, director conjunto del Jinnah Postgraduate Medical Centre.

El Hospital Civil también estaba repleto de pacientes insolados. Unos pocos ventiladores viejos removían el sofocante aire por los oscuros pasillos, mientras amigos de un policía inconsciente salían del centro médico para comprarle el agua fría que el hospital no le podía proveer.

“Así son las cosas. A nadie le importa este pobre hombre común de aquí”, se quejó Khadim Ali mientras abanicaba a su primo Shahad Ali, un verdulero de 40 años que sufrió un colapso por el calor.

Las temperaturas han alcanzado los 44 grados Celsius en la húmeda ciudad portuaria en los últimos días, por encima de la temperatura normal de 37 grados. Pero se esperaban lluvias.

“Una brisa marina comenzará en algún momento de la noche. La temperatura bajará debido al ingreso de la lluvia monzónica en la costa de Sindh, trayendo lluvia a la ciudad”, dijo Ghulam Rasool, director general del Departamento Meteorológico.

Una morgue dirigida por la Fundación Edhi había recibido más de 400 personas que murieron por complicaciones del calor, dijo el funcionario Anwar Kazmi a Reuters.

No había disponibles cifras totales de muertos en la provincia.

Los paramilitares establecieron campamentos médicos en varios puntos de la ciudad donde se entregan agua y sales contra la deshidratación.

El Gobierno provincial está siendo muy criticado por partidos opositores por no manejar bien la crisis, que se ha exacerbado por los severos cortes de electricidad.

 

Reuters